El ecosistema emprendedor en México está viviendo un momento increíble. Los jóvenes estamos tomando terreno de una manera que antes parecía imposible. Las ideas frescas y disruptivas abundan, y gracias a nosotros, grandes industrias están transformándose más allá de la simple optimización de procesos. Los jóvenes somos el futuro de los negocios. Y lo mejor de todo: emprender nunca ha sido tan sexy. Romper paradigmas es un deporte que pocos sabemos practicar, pero uno que todos los jóvenes deberíamos intentar. Ya no es necesario seguir una trayectoria tradicional para ser innovador; lo único que necesitas es visión y la determinación de hacer realidad tus ideas. Todos tenemos grandes ideas, pero la diferencia entre los que las tienen y los que marcan la diferencia es llevarlas a cabo. Entonces, ¿qué estás esperando?

En México, los jóvenes estamos definiendo nuestro futuro. Gracias a un ecosistema de emprendimiento robusto y a la tecnología que tenemos al alcance de unos taps en nuestros dispositivos, estamos logrando cambios reales. Y lo estamos haciendo con estilo, sostenibilidad y toneladas de tecnología. Emprender nunca fue tan cool. Revisando la Radiografía del Emprendimiento 2023, me di cuenta de algunos insights fascinantes que confirman algo que ya intuía: emprender desde joven ha sido la mejor decisión que he tomado en mi vida, y tú también puedes hacerlo. El límite es solo tu imaginación. De acuerdo con datos de la REM 2023 por la ASEM (Asociación de Emprendedores de México), en el país, los jóvenes mayores de 18 años están fundando más empresas que las personas mayores de 65 años. Además, más del 50% de los emprendimientos fueron generados por personas de entre 18 y 34 años. Este dato me impactó: somos los jóvenes quienes estamos impulsando el mayor número de emprendimientos en México, y como bien se sabe, las PyMEs aportan más del 50% del PIB del país. Si tienes entre 18 y 34 años y estás emprendiendo, ¡felicidades! Eres parte del cambio solo por tener una idea innovadora y ejecutarla.

En México, más del 27% de los emprendedores detectaron una necesidad que querían cubrir, y para esto, no necesitas descubrir el hilo negro. Si un niño se da cuenta de que hace mucho calor en su ciudad y en su escuela no venden paletas de hielo, y él decide venderlas, ¡ya está emprendiendo! Además, más del 26% de los emprendedores buscan crecimiento personal. Ya sea que no estén satisfechos con su salario, no quieran trabajar para alguien más o simplemente quieran más libertad, estas también son razones válidas para emprender. Eso sí, siempre es clave tener un buen plan financiero. Otro insight interesante es que más del 17% de los emprendedores decidieron mejorar algo que ya existía. Iniciar un emprendimiento es tan fácil como tener una idea y poner manos a la obra.

No importa la razón por la que emprendas: ya sea para ayudar a los demás, detectar una necesidad o generar ingresos, todo es válido. El dinero no es malo; es necesario para mantener las operaciones de tu emprendimiento. Como financiero, hablar de dinero es natural para mí, al igual que para un ingeniero hablar de sistemas o para un arquitecto de estructuras. Si te motiva emprender para generar dinero, está bien, pero es importante que sepas por qué lo haces para definir hacia dónde quieres llegar.